Ahora que se aproximan unos días de fiesta podemos pensar un poco en nosotras y escoger la opción de visitar y disfrutar de un balneario. Estos conocidos lugares te ofrecen baños medicinales además de favorecer el reposo y la relajación. El hecho de que te ofrezcan alojamiento en las propias instalaciones hace que realmente te tomes unos días de auténtica desconexión.

Normalmente los balnearios están situados en puntos geográficos concretos dónde las aguas termales nacen de auténticos manantiales naturales.

El tratamiento que se ofrece para todos los húespedes es la hidroterapia, es decir, el uso del agua de forma terapéutica. Las propiedades de estas aguas junto con la manera de aplicarla produce grandes beneficios a nivel físico y psíquico.

Cuando se aplica, por ejemplo, con presión en las piernas favorece el retorno venoso y la circulación se torna más fluida por lo que la sensación que produce es de relajación. Cuando se aplica mediante masajes con el objetivo de tonificar la musculatura se pueden ayudar de aromaterapia y contraste de temperaturas. Si tenemos en cuenta la mineralización y pureza de las aguas se garantizan múltiples beneficios.

Beneficios de la hidroterapia

La composición química del agua depende de cada balneario en concreto, pero todos tienen en común una serie de beneficios que te comentamos a continuación:

  • Aumento sustancial de la eliminación de residuos, logrando una acción desintoxicante
  • Relajación de la musculatura profunda
  • Activación del metabolismo y regulación de los procesos digestivos
  • Hidratación y oxigenación de las células, mejorando la piel y el tono muscular
  • Estimulación del sistema inmune, aumentando las defensas naturales de nuestro organismo
  • Mejora la fisiología de los órganos internos mediante la mejora de la circulación y calidad del suministro de sangre

Además de la hidroterapia es común que en la mayoría de balnearios se ofrezcan también tratamientos de belleza, aplicación de productos cosméticos de calidad, peelings, nutrición dérmica,… todos ellos para cuidar y rejuvenecer nuestra piel y ayudar en el tratamiento de problemas dermatológicos leves.

Hay que tener presente también que hay ciertas contraindicaciones a tener en cuenta en algunos casos. En personas con problemas de tensión no se les recomienda ni los baños calientes ni las saunas. En mujeres embarazadas, niños y ancianos hay que tener mucha precaución al tomar baños prolongados y evitar cambios bruscos de temperatura. Por último tienen que olvidarse de los baños fríos las personas que padecen de ciática, inflamación pélvica o que sean propensos a la irritación de vejiga.

A pesar de esto está más que demostrado que la visita a un balneario especialmente en épocas de mucha tensión o estrés, puede ayudarnos a evadirnos durante unos días de lo que nos altera para centrarnos en nosotras mismas y lograr una relajación y bienestar inmejorable. ¿Te animas?

Justo debajo del mentón tenemos una piel muy fina con tendencia a la flacidez, que con el paso del tiempo y, otras causas que comentaremos a continuación, es dónde aparece la papada.

Aunque es más común en personas con sobrepeso y de la tercera edad, cualquier persona puede padecerla incluso de forma prematura. Por eso es muy recomendable prevenir su aparición e intentar reducir su aspecto con sencillos ejercicios que se pueden realizar en poco tiempo y que nos ofrecerán resultados óptimos a medio plazo.

Otras causas de la aparición de la papada son:

La excesiva exposición solar: ya sabemos que los excesos de radiación ultravioleta en la piel son siempre nefastos. El tejido cutáneo tiende a resecarse y a perder el colágeno natural que se encarga de la elasticidad. El envejecimiento prematuro es un factor determinante para que se forme la papada.

Perder abundante peso en poco tiempo: el perder peso de esta manera tan abrupta produce la papada por des colgamiento. La grasa y los tejidos adiposos se eliminan con el adelgazamiento pero la piel no tiene el tiempo necesario para adaptarse a la nueva situación, por lo que se genera un exceso de tejido debajo de la mandíbula.

Predisposición genética: Factores fisiológicos y las características físicas heredadas hace crecer las posibilidades de sufrir esta flacidez. Esto les pasa por ejemplo a las personas con cuellos cortos y mandíbulas pequeñas.

La prevención es posible. Si somos capaces de adquirir unos hábitos saludables que nos cuidan por dentro y nutren nuestra piel, evitándole excesos negativos, podremos evitar el desarrollo de la papada.

  • Evitaremos la exposición al sol durante las horas de mayor riesgo (de 10 a 15 h.)
  • Usar siempre protección solar en el área del cuello
  • Beber el agua durante el día suficiente para tener una piel bien hidratada
  • Realizar ejercicio de forma regular para tener unos músculos firmes y quemar los excesos de grasa localizada
  • Masajear la zona del cuello y el escote para favorecer la regeneración celular.
  • Incluir en nuestras rutinas de limpieza e hidratación facial, siempre, la zona del cuello y el escote.
  • Evitar tener durante tiempos prolongados el cuello inclinado (postura generalizada para ver el móvil….) Deberíamos cuidar nuestra postura intentando estar erguidos con la nuca recta y los ojos a la altura de la pantalla.
  • Si descansamos sobre una almohada excesivamente gruesa el cuello descansa en una postura forzada e inclinada. Escogeremos almohadas más finas.

 

Tras estas recomendaciones que cualquiera puede tener en cuenta os proponemos unos ejercicios naturales y sencillos con los que reducir la papada y tonificar el cuello de una forma rápida y eficaz.  Decenas de músculos de la cara y el cuello son los responsables de que la piel que los cubre esté tersa. Si trabajamos estos pequeños grupos musculares podremos frenar la aparición de arrugas y la flacidez. Eso sí, es necesario ser constante para poder disfrutar de los resultados.

Ejercicio 1: Con la boca cerrada y manteniendo una postura erguida realizaremos movimientos circulares con la lengua sobre el paladar superior. Siguiendo el sentido de las agujas del reloj, haremos este ejercicio diez veces tres veces al día. Lograremos tonificar muchos de los músculos del cuello.

Ejercicio 2: En una posición relajada y con la espalda recta hay que exagerar la pronunciación de las cinco vocales, procurando abrir la boca todo lo que te sea posible para trabajar la parte baja de la mandíbula y estilizar el cuello. Sería bueno repetir  este ejercicio unas diez veces al día.

Ejercicio 3: Procuraremos levantar la cabeza todo lo que podamos. Con la boca cerrada estiraremos el cuello hacia atrás logrando que la barbilla se levante y salga hacia adelante. Realizaremos diez repeticiones.

Ejercicio 4: Si tensamos durante unos segundos los músculos del cuello lograremos tonificarlos. Para conseguirlo podemos practicar una sonrisa invertida, intentando mantenerla durante varios segundos, una decena de veces.

Ejercicio 5: Este es quizás el ejercicio más sencillo ya que no requiere prestarle demasiada atención. Mientras masticamos chicle movilizamos y trabajamos la musculatura de la mandíbula y logramos que esta se mantenga fuerte.

Ejercicio 6: Colocadas estirando el cuello y levantando la cabeza, con la boca un poco abierta, realizaremos un suave masaje con la mano alrededor del cuello, estirando suavemente la piel hacia abajo. Realizaremos este masaje unas tres veces al día.


Estos son ejemplos que se pueden combinar o programar para crear una rutina personal según las necesidades. Es muy importante ser constante y abandonar aquellos ejercicios que nos produzcan alguna molestia o fatiga excesiva.

También es bueno saber que existen otras maneras de eliminar la papada con métodos no invasivos como con los tratamientos con radiofrecuencia, el láser metabólico y otras tecnologías de la clínica estética cuyos resultados están garantizados.

No dudes en consultar a tu profesional de confianza para conocer cuál es tu mejor opción.

Hay muchos alimentos que podemos considerar beneficiosos para combatir la oxidación y el envejecimiento, nuestra intención es darlos a conocer para que lleguen a formar parte de la dieta de todas las personas que quieren tener una alimentación saludable con la cual cuidar también su belleza.

Hoy os hablamos de la naranja sanguína, en primer lugar, la cual destaca sobre otras frutas por su alto contenido en antioxidantes y vitamina C, componentes muy beneficiosos para la salud. Fruta de temporada (de diciembre a marzo) hay que consumirla en su mejor momento para que nos aporte todos sus beneficios.

La reconoceréis por su peculiar color del que surge su nombre. Este pigmento rojo llamado antocianina, está también presente en flores y otras frutas, pero no es habitual en los cítricos.

Son muchos los dietistas que reconocen los beneficios de la naranja sanguína, ante las otras variedades más comunes, por la vitamina C, las antocianinas y el aporte extra de beta carotenos. Estos tres factores intrínsecos ayudan a proteger a nuestras células de la acción de los radicales libres.

También en rica en vitamina B1 y ácido fólico, cuya acción ayuda a mantener un correcto funcionamiento del sistema nervioso y algunos estudios relacionan estas substancias con el correcto rendimiento intelectual, la disminución de la fatiga y la prevención de algunos tipos de anemia.

En cuanto a los beneficios relacionados directamente con la belleza y la prevención de los signos de envejecimiento, destaca este fruto por su capacidad protectora de los tejidos corporales, entre ellos la piel y las mucosas.

Del segundo fruto que os queremos hablar es de la Granada. Ahora en otoño la gran protagonista, la granada es una fruta muy rica en polifenoles por lo que destaca su poder antioxidante. Tiene también propiedades antisépticas y antiinflamatorias que ayudan a mejorar el estado de nuestra piel. La granada si la ingerimos en forma de extracto puede protegernos de los efectos dañinos de la luz ultravioleta, los rayos UVA y UVB; Siendo además capaz de regenerar la dermis y  la epidermis.

Es muy rica en potasio, magnesio, fósforo y hierro y en vitaminas como la C, la B1, la B2 y la Niacina, por lo que se la puede considerar un gran alimento anti-aging, que tenemos que tener muy en cuenta para complementar nuestra dieta saludable.

En el rostro hay zonas muy diferenciadas por sus características especiales. El contorno de ojos es una de las más frágiles. Es una zona de piel hasta cinco veces más fina que la del resto del cuerpo. También se caracteriza por tener una menor cantidad de fibras de colágeno, elastina y glándulas sebáceas.

En la mayoría de ocasiones el factor hereditario es determinante en la aparición de las ojeras. Una disposición morfológica concreta con una piel tan fina que hace visible la acumulación de sangre, oscurece inevitablemente la zona, con un color amoratado.

Otra posible causa es la falta de hierro, debido a que esta carencia produce una coagulación en los vasos sanguíneos de la zona ocular. De forma opuesta la dilatación de estos mismos vasos, debida a la falta de sueño, produce el efecto de envejecimiento y cansancio por el aspecto oscuro de la zona del contorno del ojo.

Tras conocer algunos de los factores que provocan la aparición de las molestas ojeras te recomendamos varios remedios para ayudar a prevenir su aparición y disimular el aspecto de cansancio que nos obligan a lucir durante su presencia.

Usar las bolsitas de té verde. Tras hacerte una infusión y haberlas enfriado durante unos minutos en la nevera, nos las colocaremos sobre los ojos durante unos diez minutos para que su poder antioxidante y descongestionante nos ayude a suavizar el color y la hinchazón de los ojos.

La leche actúa también de forma semejante aunque nos aporta un extra de hidratación debido a su contenido en grasa natural. Mojaremos dos algodones para desmaquillar en leche fría y nos los aplicaremos sobre los ojos durante unos 15 minutos.

Teniendo en cuenta la el poder del frío contra este antiestética molestia podemos utilizar también dos cucharas que habremos enfriado previamente y que aplicaremos para que ese frío se encargue de comprimir los vasos sanguíneos excesivamente dilatados y nos ayude en la disminución del color de las ojeras.

Como remedio natural no podemos dejarnos el tan conocido pepino, el gran aliado astringente que mejora el flujo sanguíneo de la zona reduciendo las ojeras y también la hinchazón.

Si es el caso que no encontramos el momento para realizar estas aplicaciones y tenemos que lograr uniformidad en el rostro podemos recurrir al maquillaje, en concreto, al corrector. Es importante saber escoger nuestro tono en función del color de nuestra piel y aplicarlo correctamente para poder sacarle el mayor partido.

Es conveniente utilizarlo con un pincel aplicador, para posteriormente realizar pequeños toques con los dedos hasta que podamos cubrir la zona en su totalidad. Finaliza matizando el corrector con polvos traslúcidos.

En realidad todos estos son remedios que nos ayudan en el momento concreto en que queremos disimular los efectos visuales de las ojeras. Pero la mejor manera de prevenir su aparición e intentar eliminarlas, en el caso de que no sean de carácter hereditario, sería el incorporar en nuestras vidas hábitos saludables tan importantes como el dormir el tiempo y la calidad necesaria, eliminar toxinas que nos llegan a través de la alimentación y los hábitos tóxicos como el fumar, y cuidar nuestra piel y organismo desde el interior.

En el mundo de la estética existen también, hoy en día, multitud de tratamientos que te ayudarán a lograr un aspecto más juvenil y saludable. Totalmente indoloros y sin efectos secundarios. Lucir una nueva mirada es posible.

Terminando el verano muchos son los propósitos para este nuevo período. Uno de los más habituales es iniciarse en el deporte, ya sea apuntándonos a un gimnasio, como probando aquellos que siempre nos han llamado la atención pero que nunca hemos encontrado el momento.

Algunos de los beneficios, comunes para  a la mayoría de deportes son:

  • Adelgazar: practicando deportes que impliquen un gasto calórico controlado, combinando cardio con fuerza y resistencia, lograremos con constancia y voluntad adelgazar aquellos kilos que hemos engordado en verano.
  • Tonificar: Trabajando la musculatura específica logramos tonificar zonas como los glúteos, los brazos, las piernas….
  • Desconectar: Cualquier tipo de deporte es beneficioso para evadirte durante unas horas del constante ir y venir de pensamientos. La liberación de endorfinas produce un efecto muy beneficioso en la reducción del estrés y te aporta energía y sensaciones que seguro te harán repetir.

Un buen ejemplo pueden ser la natación y la bicicleta, dos ejercicios muy completos que te aportarán múltiples beneficios a nivel mental y corporal. Te explicamos, a continuación muy buenas razones para practicar, en concreto, estos dos deportes.

 

Razones para practicar la natación

Sin lugar a dudas la natación es un deporte muy completo que te ayuda a quemar calorías, tonifica todo tu cuerpo y activar tu metabolismo.

Lógicamente tenemos que ser conscientes de que cuando se inicia un ejercicio que no se ha practicado nunca es bueno empezar poco a poco, orientados por alguien profesional que nos indique como empezar e ir evolucionando. Las primeras molestias como las agujetas o los dolores musculares nos indican que realmente estamos trabajando y se pueden aliviar fácilmente con, por ejemplo, geles antiinflamatorios.

La natación nos ayudará a esculpir nuestro cuerpo, las grasas de abdomen y cintura se verán comprometidas y serán las primeras en disminuir con la constancia del ejercicio. En una hora de natación se pueden quemar hasta 600 calorías y trabajaremos con todos los grupos musculares. El agua nos ofrece el aliciente de ejercer una mínima resistencia y por ello los movimientos implican tonificación.

Otra de las razones para escoger la natación es el pequeño riesgo de sufrir lesiones. Al agua te permite practicar el ejercicio sin el efecto de la gravedad, por ello las articulaciones no se ven en absoluto forzadas ni sufren repetidos movimientos que comprometen sus límites, como por ejemplo en el running.

Por último señalar un estudio presentado en la American College of Sports Medicine Conference, en el que se argumentaba que la natación si se practica con regularidad, puede aportarte una importante dosis de juventud ya que en este estudio se han recopilado datos que aseguran que los nadadores habituales tienen unos valores en presión arterial, colesterol, funciones cardiovasculares y cognitivas equivalentes a personas de menor edad.

Razones para ir en bici

Aunque puede parecer un deporte difícil de practicar en la ciudad, siempre se pueden encontrar cerca de ellas, perfectas rutas para realizar cómoda y progresivamente el ejercicio que nos aporta la bicicleta.

Fortaleceremos la función cardiovascular ya que el ejercicio de resistencia ayuda a mejorar el bombeo del corazón haciéndolo más eficaz y permitiendo que disminuya la tensión arterial.

Trabajaremos todos los músculos de las piernas pero también de los brazos y de los hombros. No podemos olvidar los estiramientos al terminar el ejercicio ya que la posición en la bicicleta tiende a acortarlos.

Aumentaremos la eficacia de nuestro sistema inmunitario ya que el movimiento regular y moderado incrementa su acción, pudiendo hacer frente mejor a las infecciones comunes como los resfriados o las gripes.

Y quemaremos, al igual que con la natación, las calorías que nuestro cuerpo tiende a acumular en exceso.

No es necesario realizar un ejercicio intenso para que con el ciclismo empecemos a notar los múltiples beneficios que nos aporta un deporte al aire libre, cargado de buenos momentos y pequeños retos que al ver que podemos superar, también nos ayuda a mejorar nuestra autoestima.

Estos han sido dos ejemplos aleatorios, pero como ya hemos explicado en anteriores posts el practicar cualquier ejercicio de forma moderada junto con unos hábitos alimenticios saludables nos llenará de vitalidad y energía que se reflejará claramente en nuestra belleza y bienestar.

Cuando nos damos cuenta de que tenemos varices es imprescindible acudir a los especialistas en Angiología y Cirugía Vascular, quienes están capacitados para abordar de forma correcta el tratamiento de esta dolencia.

Normalmente las varices son la primera expresión visible de una alteración en la circulación venosa. Según su gravedad puede tener una sintomatología distinta, pudiendo llegar a ser una afección crónica y grave. En España se calcula que aproximadamente 2.500.000 personas tienen varices y reciben tratamientos quirúrgicos para solventar su problemática.

La circulación venosa se puede ver alterada cuando el retorno de la sangre hacia el corazón no se está realizando de forma eficaz debido a una alteración de las válvulas venosas, que al perder su funcionalidad, provocan una acumulación de sangre en la vena y por consiguiente una dilatación excesiva. Normalmente se desarrollan en los miembros inferiores pudiéndose dar también en otras zonas corporales.

Siendo múltiples los factores de riesgo para llegar a padecer esta dolencia, tales como:

La obesidad, el sedentarismo, los hábitos tóxicos como el tabaco, la hipercolesterolemia, los anticonceptivos, los antecedentes familiares….

Son también numerosas las medidas preventivas que los especialistas recomiendan para favorecer la no aparición o retrasar la evolución de las varices y sus complicaciones.

Realmente fáciles de llevar a cabo por cualquier persona, las medidas de las que hablamos consisten en mantener la piel limpia e hidratada, evitar una exposición prolongada ante altas temperaturas, ya sea durante la exposición solar, los largos baños con agua caliente, las saunas o baños de vapor, etc…Favoreciendo en cambio la vasoconstricción con el frío, pudiendo realizar duchas de agua fría desde los pies hacía los muslos, así como los masajes que incrementarán el retorno venoso gracias al uso de geles o cremas específicas para esta afectación.

En cuanto a las recomendaciones que se refieren a la alimentación quisiéramos destacar el poder alimentarse de forma saludable, controlando el exceso de peso como posible desencadenante, el enriquecer nuestra dieta con fibra natural proveniente de los frutos secos, las legumbres, los cereales integrales, para evitar el estreñimiento.

Factor clave también el beber el agua suficiente para aportar fluidez a la sangre, el consumir alimentos antioxidantes y buscar el potasio que nos aportan alimentos como el plátano o la levadura de cerveza, entre otras muchas opciones que contempla una óptima nutrición de nuestro cuerpo.

Muchas de las personas que sufren con las varices son personas que por su trabajo deben pasar muchas horas de pie o también en el lado opuesto hay quienes el sedentarismo se ha instalado en sus vidas.  Se aconseja que estos dos extremos sean compensados realizando un mínimo de 30 minutos al día de ejercicios moderados como el caminar, subir escaleras, nadar… Si estas en el caso de que debes estar de pie muchas horas en tu jornada sería recomendable realizar en periodos frecuentes, en la medida de lo posible, ejercicios que activen la musculatura de las piernas, caminar de puntillas, sobre los talones, realizar pequeñas flexiones y giros, estimular los dedos de los pies, etc.. También es muy adecuado en los momentos de descanso, mantener durante un rato los pies elevados para favorecer el retorno venoso.

Existen diferentes grados de afectación de las varices y por ello podemos decir que en un número determinado de casos se podrán controlar y resultaran ser nada más un problema estético, sobre el cual se ha trabajado mucho para poder ofrecer los mejores tratamientos llegando a eliminar por completo su manifestación sin tener que pasar por el quirófano.

Tratamientos con microespuma esclerosante, láser/ fotoesclerosis, o radiofrecuencia, son algunas de las opciones que podemos encontrar para solventar el problema estético de las varices. Conseguir unas piernas bonitas es posible, siguiendo las recomendaciones de prevención y asesorándonos por los mejores profesionales que nos orientarán en cuál es el mejor tratamiento ajustado a nuestras necesidades.

En esta época del año en la que volvemos a la rutina laboral plenamente normalizada necesitamos estar en plena forma y sentirnos bien. Las vacaciones seguramente nos han permitido descansar y “desconectar” pero si tenemos dolores musculares esto no sirve de mucho. Los masajes descontracturantes son una opción muy saludable y agradable para tratar estas dolencias que, en ocasiones, dificultan nuestro día a día.

Como su nombre indica es un tipo de masaje que sirve para relajar la musculatura, deshaciendo las contracturas que se suelen crear debido a las malas posturas, el estrés, la falta de descanso o por tener una vida demasiado sedentaria.

Los efectos de los masajes no sólo se reflejan en el plano físico sino que de la manera que están realizados, la atmosfera que se crea en el momento del tratamiento, también producen grandes efectos en el plano mental y emocional.

Las técnicas que se suelen usar en este tipo de masajes van desde la aplicación manual de aceites esenciales, hasta el uso de piedras calientes y aromaterapia. Son muchas las opciones que podemos encontrar, se trata de informarse muy bien y escoger aquella que nos haga sentir más cómodas. Lo que si tenemos que saber es que es un tipo de masaje un poco más intenso que un masaje relajante, ya que se trabaja más intensamente pero no por ello tiene que resultar doloroso o incómodo.

Los beneficios que los masajes descontracturantes son:

  • Disminución del dolor crónico
  • Desintoxicación corporal, debida a la estimulación de la linfa, enargada de la eliminación de toxinas
  • Disminución del estrés y favorecedor de un descanso más profundo y de calidad
  • Favorecedor de la circulación sanguínea, encargada de la reparación de tejidos dañados
  • Alivio de migrañas y dolores de cabeza que puedan estar causados por una excesiva tensión en la zona cervical

Estos masajes suelen tener una duración media de unos 30 – 60 minutos y se puede afirmar que desde el primer masaje se obtienen los beneficios psicocorporales que un buen profesional y unos productos de calidad nos pueden ofrecer.

El embarazo es una etapa vital en la que nos surgen muchas dudas o inseguridades. El cuidado de nuestra piel es muy importante, conocer las claves para mantenerla sana es el primer paso para saber aplicar los tratamientos adecuados en cada periodo del embarazo.

Por sus características tan diferenciadas y únicas se suele dividir el embarazo en tres trimestres, en los cuales los cuidados que deberíamos proporcionar a nuestra piel también son distintos por la peculiaridad de cada etapa.

Durante el primer trimestre, en los primeros meses, la piel está muy sensible y se irrita fácilmente. Sería adecuado aplicarnos productos calmantes e hipoalergénicos que nos ayuden a mantenerla en buen estado.

A medida que va pasando el tiempo, podemos observar que ciertas zonas de nuestro cuerpo tienden a oscurecerse, debido a la hiperpigmentación, que suele aumentar en este período debido a que las hormonas están en constante aumento.

Es imprescindible proteger correctamente la piel durante  la exposición solar, con un producto adecuado con un factor de protección elevado. El tener este hábito nos puede evitar sufrir los efectos del cloasma, una mancha cutánea que puede llegar a crecer a ambos lados del rostro, frente o bigote y que puede llegar a ser visible incluso después del embarazo.

En estos primeros meses se suele notar que hay ciertos olores que nos molestan o realmente nos cuesta asimilar, por ello se recomienda no usar productos cosméticos altamente perfumados.

En el segundo trimestre aumenta la secreción sebácea en la mayoría de mujeres, y a pesar de que esto nos evita la sequedad y no ofrece luminosidad en el rostro también pueden aparecer granitos, impurezas o acné. Hay que ser prudentes en escoger los productos para el tratamiento del acné, consultar siempre al dermatólogo y evitar las cremas que contengan retinoides, como retinol, tretinoína o adapaleno, ya que pueden ser altamente perjudiciales.

La aparición de las primeras estrías suele darse en este período, por lo que se recomienda, a modo de prevención, empezar con el uso de cremas específicamente desarrolladas para mantener la piel suficientemente elástica y nutrida.

En el último trimestre, se producen las molestias y alteraciones naturales por los cambios corporales en cuanto a peso y volumen. Se produce con frecuencia retención de líquidos en piernas y tobillos. Es recomendable no llevar ropa ajustada, descansar durante el día manteniendo las piernas moderadamente elevadas, evitar el sedentarismo y utilizar geles descongestionantes aplicándolos en forma de masajes.

En cuanto al rostro, podemos destacar los signos de cansancio que se suelen reflejar en el contorno de los ojos, debido a la falta de sueño, por las dificultades que las embarazadas suelen encontrar para conciliar y mantener un sueño reparador. Para intentar disimular las ojeras o las bolsas hay una serie de remedios naturales muy conocidos que suelen tener muy buenos resultados, como por ejemplo la aplicación de rodajas de pepino sobre los ojos, mejor si estan frías. Con su efecto descongestionante y su aporte de beneficiosas vitaminas actúan contra la inflamación, al mismo tiempo que mejoran la pigmentación.

Hay que cuidar también la zona del escote y el pecho utilizando un sujetador adecuado que sujete correctamente sin causar excesiva presión. Existen también muy buenos productos que eliminan la sensación de hinchazón y al mismo tiempo, reafirman de modo preventivo, la zona del escote, la cual va a sufrir intensos cambios de volumen en poco tiempo.

Son estos unos sencillos consejos que podemos seguir durante las diferentes etapas del embarazo, en las que es muy recomendable sentirse bien, verse bella y sentirse en forma para poder disfrutar plenamente esta etapa tan especial en nuestras vidas.

Se calcula que un 15% de las mujeres tiene un pecho excesivamente grande, que puede superar la talla 120 o 130. Al contrario de lo que los estereotipos que la sociedad ha creado sobre el físico femenino, el tener un gran volumen de pecho es algo poco saludable. Los problemas derivados de esta característica física pueden ir desde la dermatitis, dolores en cuello, hombros y espalda hasta problemas psicológicos como la baja autoestima y las dificultades de relación.

La calidad de vida de estas mujeres, en su mayoría, se ve mermada por las dificultades que se encuentran en su día a día. Puede ser difícil practicar ejercicio físico, encontrar ropa con la que se sienta cómoda y le guste, relacionarse de forma confiada por su baja autoestima así como afrontar los dolores, que se llegan a cronificar, de espalda u hombros.

Actualmente la cirugía estética, encargada de realizar la reducción de pecho o mamoplastia de reducción, es la solución más definitiva para acabar de forma clara con todos estos problemas.

Los aumentos de pecho son intervenciones que suelen solicitar mujeres de entre 18 y 44 años. Por el contrario, la reducción la solicitan mujeres de edades más avanzadas, pudiendo superar incluso la franja de edad de los 60 años. También existe el caso de las jóvenes que sufren la hipertrofia mamaria virginal, en la que el pecho crece de forma desproporcionada tras la primera menstruación. Suelen ser chicas acomplejadas que adoptan malas posturas y no pueden realizar una vida normal.

Las técnicas más avanzadas pueden realizar la intervención dejando el mínimo rastro de antiestéticas cicatrices. El preoperatorio es el habitual de cualquier intervención estética, aunque se solicita también una mamografía para descartar la posible presencia de tumores. La operación se realiza con el uso de la anestesia general y suele durar unas 3 o 4 horas. Al contrario de lo que se pueda pensar, la reducción de pecho, es un poco más difícil que el aumento. Se tienen que extirpar partes de la glándula mamaria y de grasa, teniendo que recolocar de forma estética el tejido sobrante.

Y es por esta complejidad que es muy importante, como toda cirugía, que se realice exclusivamente en un quirófano de un centro hospitalario o clínica y tener presente que la persona que realice la intervención debe estar titulada y ser profesional y especialista en Cirugía Plástica, Reparadora y estética.

El alta de la paciente se suele dar a los dos o tres días tras la operación. Podrá recuperar su vida normal con el uso, en un principio, de un sujetador especial.

En México y en diversas zonas tropicales crece de forma natural esta maravillosa fruta. Uno de sus componentes principales que forma parte del fruto cuando está maduro, la papaína, es una enzima activa cuyos beneficios han sido estudiados y considerados óptimos para el cuidado de la piel, por su acción anti-inflamatoria y anti-séptica. Es también una rica fuente de nutrientes antioxidantes como los carotenos, vitamina C, flavonoides, vitaminas del grupo B, los minerales potasio y magnesio y fibra.  Por ello los extractos de papaya son incluidos en algunas fórmulas de jabón y suplementos alimenticios.

Los usos de este jabón y sus beneficios los exponemos a continuación:

El jabón de papaya tiene grandes propiedades exfoliantes, que son unas buenas aliadas para eliminar las células muertas de nuestra piel, rejuveneciendo las pieles más secas con tendencia escamosa. Por esta acción también es conocido su efecto beneficioso en el tratamiento del acné, ya sea en el rostro o en otras partes del cuerpo.

Una de las principales causas del acné es la obstrucción de los poros por las células muertas que no son debidamente eliminadas. Las personas cuya piel es grasa y con exceso de sebo tienen problemas para que la exfoliación natural de su piel se dé con normalidad, por ello deberían tener especial cuidado en realizar a diario una exfoliación suave que respete su piel y aporte la suficiente oxigenación e higiene. El Jabón de papaya es una muy buena opción para desempeñar esta rutina.

Aunque no hay suficientes estudios clínicos al respecto, se suele usar de forma regular el jabón de papaya para aclarar la piel de forma progresiva o bajar el color de algunas manchas solares. Algunos de estos jabones se comercializan bajo esta afirmación. Su acción es más natural que en el caso de las cremas blanqueadoras químicas, su efecto exfoliante limpia las capas superficiales de la piel, en ocasiones dañadas por el sol, descubriendo capas dérmicas más claras o luminosas. Su aporte de vitamina A logra crear además un efecto protector.

Se conoce también otra aplicación, que ahora en verano puede sernos muy útil. La papaína es capaz de reducir la inflamación, la picazón y mitigar el dolor de la mayoría de picaduras de insectos. Lavar la piel afectada con este jabón aliviará de forma casi inmediata las molestias que nos suelen causar estas picaduras.

Son muchas más las aplicaciones con las que podemos usar la papaya, tanto para el cuidado de la piel como para nuestra salud, es una joya que nos ofrece la naturaleza y de la que podemos disfrutar siendo conscientes de que en algunas personas puede producir alergia, por ello es recomendable realizar una pequeña prueba cutánea antes de la primera aplicación.